¿Cómo podemos tener éxito en la vida cristiana? Es una pregunta que quizás muchos cristianos se hacen, y de hecho es una pregunta muy válida. Debemos saber cómo ser buenos cristianos para poder salir adelante como personas y como hijos de Dios. Hay cuatro aspectos que debemos tomar en cuenta para ser cristianos éxitosos. Para esto, vamos a leer un versículo que se encuentra en el libro de Juan, y luego aprenderemos cuáles son los aspectos importantes para el éxito en la vida cristiana.
El ladrón no viene sino para hurtar, matar y destruir; yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia.
Lucas 10:10
Contrario a lo que algunas personas podrían creer, Cristo no se refería al diablo en este versículo, cuando habló del ladrón, sino de los falsos maestros y profetas. Sin embargo, aunque esas personas quisieron hacer daños, Cristo nos da vida abundante, o sea, una vida exitosa, y en seguida veremos cómo ser éxitosos en nuestras vidas cristianas.
DEBEMOS TENER UN CONCEPTO CLARO DE LA SALVACIÓN
¿Qué es la salvación? Es una pregunta que muchos cristianos contestan erróneamente. Debemos entender que no todos las personas son hijos de Dios. nos damos cuenta de eso cuando leemos Juan 1:11-13: "A lo suyo vino, pero los suyos no lo recibieron. Mas a todos los que lo recibieron, a quienes creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios. Estos no nacieron de sangre, ni por voluntad de carne, ni por voluntad de varón, sino de Dios". Como podemos ver, solamente los que creen pueden ser sus hijos. Para ser salvos, debemos aceptar a Cristo como nuestro Señor y Salvador. Eso se hace por medio de una oración. Si deseas aceptar a Cristo, puedes hacere clic aquí AQUÍ y encontrarás la oración necesaria para hacerlo. También debemos nacer de nuevo. Esto significa un cambio de nuestro ser, y Dios nos ayudará a hacer eso. Al nacer de nuevo, dejamos de practicar el pecado. Esto no significa que nunca más pecaremos, sino que ya no lo haremos como antes. Ya no lo hacemos por gusto, sino que ocasionalmente cometemos pecados. Al aceptar a Cristo y nacer de nuevo, nos convertimos en hijos de Dios.
Necesitamos la salvación de Cristo para tener éxito en la vida cristiana. Si no recibimos la salvación, hay tantas desventajas para nosotros, pero si la recibimos, también hay muchísimas bendiciones. Hay cinco razones principales por las que necesitamos ser salvos. Primero, porque si no, recibiremos condenación. Romanos 6:23 dice lo siguiente: "porque la paga del pecado es muerte, pero la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús, Señor nuestro". En segundo lugar, sin la salvación, estamos excluídos de la presencia de Dios. Romanos 3:23 dice, "por cuanto todos pecaron y están destituidos de la gloria de Dios". Tercero, no podemos librarnos a nosotros mismos. Muchas personas creen que con sus buenas obras pueden ser salvos, pero el siguiente pasaje comprueba la falsedad de ese pensamiento: "Como está escrito: No hay justo, ni aun uno; no hay quien entienda, no hay quien busque a Dios. Todos se desviaron,a una se hicieron inútiles; no hay quien haga lo bueno,no hay ni siquiera uno" (Romanos 3:10-12). Cuarto, el pecado es un estorbo. Como ya pudimos ver, nos excluye de la presencia de Dios. Por último, porque solamente a través de Cristo podríamos ser salvos. "Y en ningún otro hay salvación, porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos" (Hechos 4:12).
DEBEMOS ENTENDER QUE ES IMPRESINDIBLE QUE NOS DESARROLLEMOS
Esto lo podemos entender en dos sentidos. Debemos desarrollarnos como personas, y como cristianos, porque de no ser así, no podremos tener éxito en la vida cristiana. Dios no va a hacer por nosotros lo que nosotros mismos podemos hacer. Por ejemplo, es cierto que si tenemos una emergencia, y no hay comida, Él de alguna forma nos proveerá el alimento. Pero no podemos esperar a que Él nos dé todo sin hacer nada, sino que debemos trabajar, y si aún somos jóvenes, debemos estudiar para algún día tener una buena profesión. En términos espirituales, debemos procurar buscar de Dios por medio de la oración y lectura bíblica. Dios quiere darnos conocimiento, pero para eso debemos leer la Biblia. No lo va a dar mágicamente sin que leamos nada. Él quiere tener una buena relación con nosotros, pero eso no pasará si no lo buscamos en oración. Lo que no podíamos hacer, Él ya lo hizo. Colosenses 2:13 dice, "Y a vosotros, estando muertos en pecados y en la incircuncisión de vuestra carne, os dio vida juntamente con él, perdonándoos todos los pecados". Como leímos antes, no podíamos salvarnos a nosotros mismos, pero Él nos dio la forma de recibir salvación. Hay mucho más que Él hace por nosotros aparte de regalarnos salvación, pero lo que podemos hacer nosotros, debemos hacerlo.
DEBEMOS COMPRENDER QUE DIOS NOS LLAMÓ A TENER VICTORIA Y SERVIRLE A ÉL
Romanos 8:37 dice que "somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó", y Dios quiere que seamos victoriosos sobre cuatro aspectos principalmente. Debemos tener victoria sobre el pecado. 1 Corintios 15:57 dice, "Pero gracias sean dadas a Dios, que nos da la victoria por medio de nuestro Señor Jesucristo". Siempre hay tentaciones, pero también hay una salida. Dios siempre no deja una puerta abierta para escapar. También debemos tener victoria sobre la carne. Esto va muy de la mano con la afirmación anterior, ya que nuestra carne es débil y nos lleva a pecar. Debemos tener victoria sobre Satanás. 1 Juan 2:12-14 dice lo siguiente: "Os escribo a vosotros, hijitos, porque vuestros pecados os han sidoperdonados por su nombre. Os escribo a vosotros, padres, porque conocéis al que esdesde el principio. Os escribo a vosotros, jóvenes, porque habéis vencido al maligno. Os escribo a vosotros, hijitos, porque habéis conocido al Padre. Os he escrito a vosotros, padres, porque habéis conocidoal que es desde el principio. Os he escrito a vosotros, jóvenes, porque sois fuertes y la palabra de Dios permaneceen vosotros, y habéis vencido al maligno". En Efesios 6, hay instrucciones muy claras acerca de cómo resistir al diablo, y Dios nos da la victoria sobre él. Por último, debemos tener victoria sobre el mundo. Cristo venció al mundo, y de la misma forma, nosotros tenemos la victoria, como podemos ver en el siguiente versículo: "porque todo lo que es nacido de Dios vence al mundo; y esta es la victoria que ha vencido al mundo, nuestra fe" (1 Juan 5:4).
Pero Dios no solo quiere que seamos victoriosos. Para tener éxito en la vida cristiana, debemos servirle a Él. 1 Pedro 2:9-10 dice así: "Pero vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios, para que anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable. Vosotros que en otro tiempo no erais pueblo, ahora sois pueblo de Dios; en otro tiempo no habíais alcanzado misericordia, ahora habéis alcanzado misericordia". Dios nos ha llamado y nos ha escogido no solo para que seamos sus hijos, sino también para que participemos en sus planes divinos. Tenemos ese gran privilegio de anunciar el mensaje de Salvación y hacer la voluntad de Dios en todo.
DEBEMOS ASUMIR NUESTRA RESPONSABILIDAD
Debemos entender que Dios es el dueño absoluto de nuestras vidas. Salmo 24:1 dice, "De Jehová es la tierra y su plenitud, el mundo y los que en él habitan". No nos pertenecemos a nosotros mismos, sino a Dios, y debemos someternos a Él por amor, ya que Cristo dijo, "Si me amáis, guardad mis mandamientos" (Juan 14:15). Todo lo que tenemos y lo que podemos hacer le pertenece a Dios también. Todos tenemos talentos y habilidades, y fueron dadas por Dios, por lo que debemos usarlos para Él. Incluso nuestro tiempo le pertenece a Dios. Tenemos una gran responsabilidad con la obra de Dios y con las almas perdidas. Todo lo que podamos hacer para esta obra, debemos hacerlo. No todos pueden predicar, o enseñar. No todos pueden profetizar o sanar. Pero todos formamos parte de un cuerpo, y tenemos diferentes funciones. En lo que podemos servir, debemos hacerlo. Si aún no has encontrado tu talento o tu habilidad, pero tienes dinero, incluso de esa forma puedes ayudar mucho. Hay muchas formas de contribuír. Debes encontrar la forma de hacerlo.
CONCLUSIÓN
Como pudimos ver a lo largo de esta enseñanza, hay cuatro aspectos importantes para el éxito en la vida cristiana. Debemos comprender qué es la salvación y valorarla. Es importante que nos desarrollemos como personas y como cristianos, y de esa forma crecer hasta el punto de tener victoria sirviendo al Señor, asumiendo nuestra responsabilidad como cristiano. Si tomamos en cuenta estos aspectos, seremos cristianos exitosos.
Escrito por,
Paul D. Gutiérrez Covey
(Nota: El presente artículo fue escrito usando un bosquejo hecho por el pastor Marco Ovares Cedeño)